Transparencia y rendición de cuentas en los sectores de defensa y seguridad en Ecuador

Ecuador se encuentra inmerso en una profunda crisis de seguridad. La tasa de homicidios por cada 100.000 habitantes ha pasado de 5,8 en 2017 a 45,1 en 2023. En los últimos cinco años (2019 a 2023) el país registra un aumento del 574% en el número de homicidios intencionales. Es así como, tomando este indicador de base, Ecuador se posiciona como el segundo país más violento de América Latina y el Caribe, solo por detrás de Jamaica. Los vínculos entre corrupción, crimen organizado e inseguridad son cada vez más visibles a través de los casos presentados por la Fiscalía General del Estado, medios de comunicación y otros actores sociales. Con la crisis, el Estado ha adoptado políticas de “mano dura”, llegando incluso a declarar al país en conflicto armado interno. Las medidas adoptadas han dado mayor protagonismo y poder a las fuerzas armadas y a la policía nacional y han transformado las instituciones civiles responsables de su gestión y control.